NUEVA YORK (AP) – Los niños de la ciudad de Nueva York volvieron a las aulas el lunes a pesar del aumento de las infecciones por COVID-19 durante las vacaciones, y el recién juramentado alcalde Eric Adams dijo a los padres: "Vamos a estar seguros y estaremos abiertos para educar a nuestros hijos".
Adams, un demócrata que asumió el cargo el sábado, dijo en una conferencia de prensa el lunes por la mañana que la ciudad se sobrepondría al aumento de los casos de coronavirus.
"Vamos a pivotar. Vamos a cambiar. Vamos a ajustarnos. Vamos a conseguirlo. Eso es lo esencial. Vamos a mantener las escuelas abiertas", dijo Adams. "Las escuelas desempeñan un papel de seguridad y estabilidad para nuestros hijos".
David Banks, el nuevo canciller de las escuelas, dijo que la ciudad ha reforzado su reserva de profesores sustitutos y ha dispuesto de personal administrativo para suplir a los profesores ausentes por el virus.
"Todos los indicios apuntan a que estamos en una situación bastante buena en este momento", dijo Banks.
El predecesor de Adams, Bill de Blasio, anunció la semana pasada un plan para reabrir las escuelas después de las vacaciones con un aumento de las pruebas de COVID-19 de vigilancia y el envío a casa de pruebas de COVID-19 a los estudiantes que tengan un compañero infectado.
Adams dijo que su oficina está estudiando si la ciudad puede ordenar la realización de pruebas en las escuelas, tratando de determinar si hay suficientes suministros y si la gobernadora Kathy Hochul tiene que firmar esa medida.
"Soy partidario de imponer las pruebas", dijo Adams.
Los funcionarios de la ciudad de Nueva York han dicho desde los primeros días de la pandemia en 2020 que los mandatos del uso mascarilla, el distanciamiento social y otras medidas de seguridad significaban que los niños estaban más seguros en la escuela que en cualquier otro lugar.
Esther Farran dijo que se sentía bien para llevar a su hija de 4 años a su preescolar público en Manhattan el lunes.
"No soy muy aprensiva, y realmente, no tenemos ninguna otra opción", dijo Farran, señalando que ella y su marido trabajan. "Y veo que esta escuela en particular toma buenas precauciones".
Trisha White dijo que la escuela en persona era mucho mejor para su hijo de 9 años que el aprendizaje a distancia.
"Podría contraer el virus fuera de la escuela", razonó mientras dejaba a su hijo y se dirigía al trabajo, "así que ¿qué puedes hacer? Yo no culparía al sistema escolar. Hacen lo que pueden".
La Federación Unida de Profesores había pedido a Adams que pospusiera el aprendizaje en persona durante una semana para evaluar la posible escasez de personal, dado el aumento de los casos de COVID-19. El presidente de la UFT, Michael Mulgrew, dijo el lunes que el sindicato sigue preocupado por la dotación de personal.
"Esta va a ser una semana muy, muy difícil", dijo en una conferencia de prensa.
Mulgrew dijo que la viabilidad de utilizar a los miembros del personal administrativo para sustituir a los profesores ausentes depende de factores tales como el número de profesores ausentes.
"No hay una respuesta única para todos", dijo.
Los nuevos casos de COVID-19 se duplicaron con creces en la ciudad durante las vacaciones escolares. En el periodo de siete días que terminó el sábado, la ciudad registró una media de 36,900 nuevos casos al día, frente a los 17.180 diarios de los siete días anteriores al cierre de las escuelas por las vacaciones.
El sistema escolar público de la ciudad de Nueva York es, con diferencia, el mayor del país, con cerca de un millón de alumnos. En la página web del Departamento de Educación de la ciudad figuraban ocho escuelas cerradas a causa del virus, de un total de 1,700.
El lunes se cancelaron las clases en el norte del estado de Siracusa debido al creciente número de casos de COVID-19 y a la falta de sustitutos para cubrir las ausencias. El distrito dijo que los exámenes para llevar a casa se seguirían dando en las escuelas de la ciudad.
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