Flujo de ayuda humanitaria a Gaza, muy por debajo de lo acordado, según cifras israelíes

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Photo credit AP News/Jehad Alshrafi

JERUSALÉN (AP) — Las entregas de ayuda humanitaria a Gaza se encuentran muy por debajo de la cantidad estipulada en el acuerdo de alto el fuego mediado por Estados Unidos, según un análisis de las cifras del ejército israelí elaborado por The Associated Press, mientras grupos humanitarios afirman que la escasez afecta gravemente a los 2 millones de habitantes del territorio.

Según el acuerdo de alto el fuego alcanzado octubre entre Israel y Hamás, Tel Aviv acordó permitir la entrada diaria de 600 camiones de ayuda a Gaza.

Sin embargo, las propias cifras de Israel dejan entrever que, en promedio, únicamente han ingresado 459 camiones al día a Gaza entre el 12 de octubre, cuando se reinició el flujo de ayuda, y el domingo, según un análisis de las cifras del COGAT, el organismo militar israelí encargado de coordinar la entrada de ayuda, realizado por la AP.

Flujo de ayuda no cumple con lo estipulado

El COGAT dijo que unos 18.000 camiones de ayuda alimentaria habían ingresado a Gaza entre la entrada en vigor del alto el fuego y el domingo. Indicó que esa cifra representaba el 70% de toda la ayuda que había arribado al territorio desde la tregua.

Eso significa que, según estimaciones del organismo, incluyendo el resto de la ayuda —artículos que no son alimentos, como tiendas de campaña y medicinas— han ingresado a Gaza un total de poco más de 25.700 camiones de ayuda, muy por debajo de los 33.600 camiones que debían haber arribado para el domingo, según los términos del acuerdo de alto el fuego.

En respuesta al análisis de AP, el COGAT insistió el miércoles en que el número de camiones que ingresan a Gaza cada día supera los 600, pero se negó a explicar la discrepancia o a proporcionar datos en bruto sobre la entrada de camiones.

El COGAT había proporcionado cifras diarias de ingresos de camiones a Gaza durante la guerra, pero dejó de hacerlo cuando comenzó el alto al fuego. Los grupos defensores de los derechos humanos aseguran que esto se debe a que controla los cruces y tiene acceso exclusivo para rastrear cuánta ayuda y bienes comerciales entran a Gaza.

Durante todo el conflicto, la ONU y los grupos de asistencia han dicho que la cantidad de ayuda que ingresa a Gaza es mucho menor de lo que afirma el COGAT.

La ONU asegura que sólo se han descargados 6.545 camiones en los cruces de Gaza entre el alto el fuego y el 7 de diciembre, lo que equivale a unos 113 camiones al día. Eso es según su base de datos en línea. Las cifras de la ONU no incluyen los camiones de ayuda enviados bilateralmente por organizaciones que no trabajan a través de la red de la ONU.

Un documento divulgado el sábado por Hamás y proporcionado a la AP sitúa en 7.333 la cantidad de camiones de ayuda que han ingresado.

Esta semana, la Oficina de Coordinación de Asuntos Humanitarios de las Naciones Unidas destacó una necesidad “urgente” de que ingrese más ayuda a Gaza, diciendo que las restricciones israelíes sobre la ayuda han obstaculizado los esfuerzos de recuperación.

Gaza aún aqueja escasez de alimentos

Los grupos humanitarios dicen que la falta de ayuda ha tenido efectos graves en muchos de los dos millones de residentes de Gaza, la mayoría de los cuales fueron desplazados por la guerra. La comida sigue escaseando mientras el territorio palestino lucha por recuperarse de la hambruna, que afectó distintas partes del enclave durante la guerra.

Madres hambrientas en dan a luz a bebés desnutridos, algunos de los cuales han muerto en el hospital, según un informe reciente de UNICEF. A medida que las lluvias invernales se intensifican, las familias desplazadas que viven en tiendas de campaña han quedado expuestas a los elementos y sin suministros para hacer frente a las inundaciones y el frío penetrante.

“Las necesidades superan con creces la capacidad de respuesta de la comunidad humanitaria, dadas las persistentes trabas”, escribió la agencia el lunes en un informe. “Estos obstáculos incluyen inseguridad, impugnaciones de despacho de aduanas, retrasos y rechazos de carga en los cruces, así como rutas limitadas para transportar suministros humanitarios dentro de Gaza”.

Israel detuvo temporalmente toda la entrada de ayuda al menos una vez en respuesta a presuntas violaciones del alto el fuego por parte de Hamás. Tel Aviv dijo que el grupo armado no ha devuelto los restos de los rehenes en el período de tiempo establecido por el alto el fuego, mientras que Hamás ha dicho que no ha podido localizar los cuerpos debido a la destrucción en el territorio palestino.

Hamás también ha acusado a Israel de violar los términos del alto el fuego debido al lento flujo de ayuda, el cierre continuo del cruce de Rafah y los continuos ataques mortales en Gaza.

Palestinos en Gaza dependen de la leña para calentarse

Desde que comenzó el alto el fuego mediado por Estados Unidos el 10 de octubre, el precio de un cilindro de gas de cocina de 12 kilogramos (26,5 libras) se ha disparado a 1.314 shekels (406 dólares), aproximadamente 18 veces lo que costaba antes de la guerra.

Eso ha dejado a muchos residentes dependiendo de la leña tanto para cocinar como para mantenerse calientes a medida que las temperaturas caen antes de la llegada del invierno, incluidos los 23 miembros de la familia Abed en la ciudad norteña de Jabaliya.

“Estamos viviendo bajo los escombros y durmiendo en sábanas rotas. Recogemos algo de leña y cortamos esponjas para encender fuego”, dijo Marwan Abed, de 62 años, a la AP. Aseguró que la leña es la única forma “de mantener a los niños calientes” y de preparar café.

Disputa sobre los restos del último rehén

Mientras tanto, Israel exige la devolución del último rehén, Ran Gvili.

La oficina del primer ministro Benjamin Netanyahu dijo a la AP el miércoles que los restos de Gvili deben ser devueltos, una condición de la primera fase del alto el fuego.

“Una vez que se complete la fase 1, comenzará la fase 2″, dijo la oficina en un comunicado.

Combatientes de Hamás y equipos de la Cruz Roja seguían buscando esta semana entre las ruinas de la Ciudad de Gaza los restos del último rehén, mientras que el grupo extremista Jihad Islámica afirmó que había entregado el último cuerpo de rehén que tenía en su poder.

El martes, Hamás pidió ejercer más presión internacional sobre Israel para abrir cruces fronterizos clave, cesar los ataques mortales en el territorio y permitir que ingrese más ayuda a la franja.

Las acusaciones son el más reciente obstáculo en lo que los líderes regionales han descrito como un momento crítico para el acuerdo de alto el fuego, mientras los mediadores buscan impulsar la tregua hacia su segunda fase, más complicada.

En tanto, el presidente estadounidense Donald Trump dijo el miércoles que “a principios del próximo año” nombrará a los miembros de un panel responsable de gobernar Gaza y supervisar su reconstrucción. Trump había dicho previamente que nombraría a los integrantes de la llamada “Junta de Paz” —un elemento clave del acuerdo de alto el fuego, hacia finales de 2025. No entró en detalles sobre el cambio de fecha.

“Va a ser una de las juntas más legendarias de la historia, todos quieren ser parte de ella”, declaró Trump. Añadió que reyes, primeros ministros y presidentes han pedido ser parte de la junta.

Muere adolescente palestino en campo de refugiados

El director del hospital Shifa en Gaza, Mohamed Abu Selmiya, indicó que el miércoles el hospital recibió el cuerpo de un joven palestino de 17 años que había sido atropellado y aplastado por un tanque israelí en el campo de refugiados de Jabaliya, en el norte de Gaza.

El ejército israelí dijo que había matado a un miliciano el miércoles que había cruzado la llamada Línea Amarilla, que divide la parte de Gaza controlada por Israel del resto, en el norte de Gaza.

Consultado por la AP para confirmar si esto estaba relacionado con la muerte del adolescente palestino, el ejército indicó que no podía proporcionar más detalles sobre el incidente.

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Los periodistas de Associated Press Megan Janetsky, en Jerusalén, Toqa Ezzidin, en El Cairo, Sam Mednick en Tel Aviv, y Aamer Madhani en Washington contribuyeron con este despacho.

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Esta historia fue traducida del inglés por un editor de AP con la ayuda de una herramienta de inteligencia artificial generativa.

Featured Image Photo Credit: AP News/Jehad Alshrafi