NUEVA YORK (WINS NOTICIAS) – Las autoridades de salud de Nueva York están investigando brotes de enfermedades estomacales, incluido el altamente contagioso norovirus, que se están propagando en Long Island y otras partes del estado esta temporada.
“El Departamento de Salud del Estado está al tanto de varias investigaciones de enfermedades gastrointestinales, algunas de las cuales han sido confirmadas como norovirus en diferentes áreas de Nueva York”, señaló el Departamento de Salud del Estado en un comunicado. “No es raro ver brotes de norovirus en esta época del año”.
Los funcionarios están investigando múltiples posibles brotes, incluidos casos en hogares de ancianos locales, mientras los residentes y los trabajadores de la salud se preparan para enfrentar el impacto del virus.
“El Departamento está colaborando con las autoridades locales en la investigación de estos brotes”, agregó el comunicado. “Las preguntas específicas sobre los brotes deben dirigirse a los departamentos de salud locales”.
Los médicos advierten que los síntomas, que pueden causar deshidratación severa, son especialmente peligrosos para los niños menores de cinco años y los adultos mayores de 85 años.
Los expertos explican que los síntomas —fiebre, vómitos, diarrea y deshidratación— suelen durar entre uno y dos días, aunque en algunos casos pueden extenderse más. El norovirus, principal causa de gastroenteritis, es común en este tipo de brotes y tiende a alcanzar su pico entre noviembre y abril, según los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC).
Los brotes suelen ocurrir en instalaciones de salud, escuelas, restaurantes y eventos con servicio de comida. El virus se transmite fácilmente por contacto directo con personas infectadas, al compartir alimentos o bebidas, o al tocar superficies contaminadas.
Los expertos en salud recomiendan mantenerse hidratado durante la enfermedad, incluso si solo se pueden ingerir pequeñas cantidades de líquido. Además, advierten evitar preparar alimentos para otros mientras se está enfermo para prevenir la propagación del virus.
Según los CDC, el norovirus representa una carga significativa para la salud pública en los Estados Unidos, causando un promedio anual de 900 muertes, principalmente entre adultos mayores de 65 años, 109,000 hospitalizaciones, 465,000 visitas a emergencias (en su mayoría niños pequeños) y entre 19 y 21 millones de casos de enfermedad.
Para reducir el riesgo de contagio, los CDC recomiendan lavarse las manos con frecuencia usando agua y jabón, quedarse en casa mientras se esté enfermo y evitar el contacto cercano con personas infectadas.
Con aproximadamente 2,500 brotes de norovirus reportados cada año en los Estados Unidos, las autoridades sanitarias instan a los residentes a tomar precauciones mientras el virus continúa propagándose por la región.
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